http://www.youtube.com/watch?v=jWLQeW-iFLI&feature=fvsr
Next to normal es un musical rock escrito por Brian Yorkey y con música de Tom Kitt. Su historia trata sobre una madre con trastorno bipolar y el efecto de su enfermedad en su familia. El musical también toca temas como el suicidio, las drogas, la vida suburbana y la ética en la psiquiatría moderna.
acto 1 (con las canciones correspondientes)
Diana Goodman, esposa y madre de familia, espera levantada. Es tarde y
su hijo ya debería haber vuelto. Mientras tanto, se entretiene
charlando con Natalie, su obsesiva hija. Luego aparece Dan, su marido,
para ayudar a preparar a la familia para “Sólo otro día más”. Pero todo
se torna alarmante cuando ven que Diana ha preparado sándwiches que
cubren la mesa de la cocina, las sillas y el piso. En ese momento se dan
cuenta de que algo no anda bien. Mientras Dan ayuda a una Diana
desorientada, Natalie sale corriendo para la escuela y entra a la sala
de ensayo de piano (“Todo lo demás”), donde se encuentra con Henry, un
compañero que le gusta oírla tocar, y que claramente gusta de ella.
En las semanas siguientes, Diana hace una serie de visitas a su
médico, mientras que Dan aguarda en el auto afuera y se pregunta cómo
manejar su propia depresión (“¿Quién está loco?/ Mi psicofarmacólogo y
yo”). Diana ha sufrido de trastorno bipolar acompañado de alucinaciones
durante dieciséis años. Su médico, el Doctor Fine, ha ido ajustando la
medicación de Diana hasta el punto de que ella dice que ya no siente
nada, por lo que le da el alta al declararla estable. Natalie y Henry
han ido acercándose mucho hasta que un día él le declara su amor
(“Perfecto para ti”) y se besan por primera vez. Diana, al presenciar
esto, se da cuenta de que sus mejores años quizás se hayan ido para
siempre. Pero Diana extraña sus días de sentirse “bien arriba” y “bien
abajo” (“Extraño las montañas”). Con el aliento de su hijo, arroja al
inodoro toda su medicación.
Unas semanas después, Dan espera con ansiedad la cena con su familia
(“La vamos a pasar bien”), pero cuando Diana aparece con una torta y
cantando el Feliz Cumpleaños a su hijo, Dan y Natalie se muestran
devastados. Dan abraza a su esposa y le explica que “Él no está aquí”.
Su hijo había muerto hacía dieciséis años de una obstrucción en los
intestinos antes de que Natalie naciera. Natalie se enfurece. Dan
sugiere volver a visitar al médico, pero Diana se rehúsa, reclamándole
que no es posible que él la hiera de la misma manera que su hija con esa
sugerencia. Dan trata de convencerla de que confíe en él. Entonces,
aparece su hijo muerto sobre el escenario y termina convenciendo a su
madre de que confíe en él en lugar de Dan (“Yo soy el único”). En su
habitación, Natalie descarga su ira con Henry y rechaza las disculpas de
Diana mientras su hermano la observa y se burla (“El superboy y la
chica invisible”).
Unos días después, Diana comienza a trabajar con el doctor Madden.
Mientras su hijo emerge para hacer sentir su presencia (“Estoy vivo”),
Dan y Natalie dudan de que las sesiones estén ayudando, pero el doctor
Madden propone la hipnosis para ayudar a Diana a descubrir la raíz de su
trauma. (“Recapacita/ Si ves que estoy cayendo”). Al final, Diana
acuerda en que ya es hora de que su hijo se vaya de su vida. Diana
regresa a casa para hacer una limpieza de todas las cosas de su hijo y
en una pausa, pone a funcionar una cajita musical (“Soñé un baile”).
Entonces, su hijo aparece y baila con ella para luego invitarla a ir con
él (“Hay un mundo”) y Diana accede.
Ya en el hospital, donde Diana yace sedada y atada a la cama, con
evidentes cortes sus venas, el doctor Madden le explica a dan que la TES
(Terapia de Electro Shock) es el tratamiento estándar a seguir en
pacientes con fuerte resistencia a los medicamentos y altas
posibilidades de suicidio. Dan regresa a casa para limpiar todo lo que
dejó Diana mientras decide qué hacer (“He estado”). Al día siguiente,
Diana ataca violentamente al doctor Madden y se rehúsa al tratamiento
("Atrapada sin Salida”), pero Dan llega y la convence de que quizás eso
sea su última esperanza (“Una luz en la oscuridad”).
acto 2
Diana recibe como tratamiento una serie de TES durante dos semanas.
Mientras tanto, Natalie explora clubes nocturnos y drogas (“Ojalá yo
estuviera aquí”). Diana regresa a casa del hospital, pero ha perdido
diecinueve años de memoria (“La canción del olvido”). Ya en la escuela,
Henry le pide explicaciones a Natalie de porqué lo ha estado evitando y
la invita al baile de primavera de la escuela “Hey,número uno”.
Dan y Diana visitan al doctor Madden. Él les asegura que la pérdida
de un poco de memoria es normal (“Segundos y años”) y anima a Dan a usar
fotografías, mementos y cosas por el estilo para ayudar a Diana a
recordar. Dan junta a la familia para hacer lo mismo (“Mejor que antes”)
con poco éxito pero cuando Natalie hace funcionar la cajita musical de
una pila de cosas, él la tira abruptamente. Diana se queda intrigada. Su
hijo aparece, sin ser visto (“Pos terapia de shock”) mientras Diana le
cuenta dan que hay algo que ella está desesperada por recordar y que
está más allá de su propio alcance. Cuando Henry llega para buscar a
Natalie, Diana se queda extraviada estudiando la cara del muchacho y le
pregunta su edad. Henry le recuerda a alguien. Sin inmutarse, Henry
corre a la habitación de Natalie para convencerla de que lo acompañe al
baile la noche siguiente (“Hey, número 2”). Diana regresa al doctor
Madden (“Tu no sabes (repuesta)”) quien le sugiere que explore su
historia y hable más con su marido. Diana regresa a casa, busca entre
las cajas de cosas y encuentra la cajita musical. Dan trata de
detenerla, pero los recuerdos de su bebé aparecen como ráfagas (“Cómo
podría olvidarte”). Cuando Diana confiesa que recuerda a su hijo de
adolescente y le exige saber su nombre, Dan se rehúsa e insiste en que
regresen para más tratamiento (“La vamos a pasar bien (respuesta)”).
Henry llega para recoger a Natalie, quien se ha vestido para el baile,
justo para ver cómo Dan le quita la cajita musical a Diana y la hace
pedazos en el piso.
Diana enfrenta a Dan, preguntándole porqué persevera luego de los
muchos problemas que ella le ha causado, mientras, arriba, Natalie le
hace la misma pregunta a Henry (“¿Por qué te quedas?”). Dan le responde,
con el eco de Henry, y ambos hacen una promesa inquebrantable de
quedarse(“Una promesa”), pero justo cuando ambas parejas se abrazan, su
hijo reaparece (“Estoy vivo (respuesta)”), lo que apresura que Diana
deba ver al doctor Madden y le pidan a Natalie que la lleve, a la vez
que Dan y Henry quedan atrás.
Diana le pregunta al doctor Madden qué deben hacer si la medicación
ha evadido el verdadero problema. Con este cuestionamiento, caen en la
cuenta de que no ha sido su cerebro el que le ha provocado tanto dolor
(“El quiebre”). Madden le asegura que las recaídas son comunes y sugiere
más TES (“Recapacita/Si ves que me estoy cayendo (respuesta)”). Diana
se rehúsa y aunque el doctor Madden apura a Diana para que continúe con
el tratamiento para su crónica y mortal enfermedad, ella le agradece y
se retira. Natalie, que espera afuera, se altera al enterarse de que su
madre ha decidido dejar el tratamiento y Diana se explica a sí misma
(“Quizás (Casi normales)”) con lo cual se abre a su hija por primera
vez. Diana apura a Natalie para llegar al baile de la escuela, donde
Henry la aguarda para consolarla y abrazarla (“Hey número 3/ Perfecto
para ti (respuesta)”).
Diana le dice a Dan que lo va a dejar y le explica que él no siempre
puede estar allí para sostenerla, que ella necesita asumir los riesgos y
afrontar sus problemas sola de una vez por todas (“Bien, entonces”).
Ella se va, dejando a su hijo con él. Mientras Dan se pregunta cómo pudo
ella haberlo dejado luego de que él estuviera a su lado durante tanto
tiempo, su hijo se acerca y le dice a Dan que él no se irá a ninguna
parte (“Yo soy el único (respuesta)”). Dan se vuelve más distraído hasta
que finalmente enfrenta a su hijo y por primera vez lo llama por su
propio nombre: Gabriel.
Natalie regresa a casa y encuentra a su padre sentado solo en la
oscuridad bañado en lágrimas. Natalie consuela a su padre y enciende las
luces de la habitación no sin antes de asegurarle que ambos encontrarán
la forma de salir adelante (“Luz”). Henry llega para estudiar y Natalie
le cuenta que Diana se ha ido para quedarse con sus padres. Diana se
queda sola y siente dolor, pero tiene esperanza. Dan visita al doctor
Madden con la esperanza de hablar acerca de Diana, pero se queda a
hablar de sus propios conflictos. Una vez más Gabriel los observa a
todos mientras la vida continúa.
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